El local familiar adherido a la Ruta del Vino de Gran Canaria, Piscos y Buches, celebra hoy su décimo aniversario. Lo hace con un evento con música y continuando con su apuesta de esta década: el producto local y de cercanía. Piscos y Buches ofrece una cocina de fusión con productos, vinos y cervezas de Canarias.
Francisco Huertas, propietario de Piscos y Buches, subraya que “al principio nos tachaban de locos, sobre todo por servir solo vinos canarios”. Puntualiza que ahora, que se valora más el producto de kilómetro 0, “la gente ya está más concienciada”. “Piscos y buches es un homenaje a la cocina que se hacía antes por parte de nuestras abuelas y le damos un giro más moderno adaptándolo a la clientela”, señala.
Huertas resalta también la ubicación, en el Mercado del Puerto, como alternativa de ocio para público local, y para turistas, cerca de Las Canteras y la Onda Atlántica. Concluye que “ofrecemos una experiencia al turista con producto local, desde unas papas arrugadas a un cochino negro, pasando por vinos canarios, cervezas canarias y un postre canario”.